¿POR QUÉ NO ESCRIBIR UN BLOG?

¿Por qué no escribir un blog?

Ilustración Luis Llacer @llacerart Hay tantos blogs en Internet que uno más no se iba a notar. Dudo que algo de lo que yo pueda contar ...

martes, 27 de junio de 2023

Entre el bien y el mal.

 


Me gustan los combates de UFC. Eso de ver dos tíos partiéndose la cara tiene algo que engancha. A veces, viendo un combate de estos imagino que soy uno de los luchadores, siempre el que gana.

No, en serio, no siempre fantaseo que soy uno de los luchadores porque hay tipos que son tela de feos, y no quiero ser un tipo feo que pelea, aunque sea el que gane. Lo que sí me pasa es que elijo un preferido por las facciones de su cara. Por ejemplo, que un tipo tiene cara de asesino en serie, ese quiero que pierda siempre. De hecho, aunque no sé si esto solo me pasa a mi, que soy un hijo de puta rebuscado, pero cuando gana el que no quiero, busco en youtube videos de peleas en las que haya perdido y disfruto su derrota incluso más que la victoria de un luchador que me guste. Hasta me hago seguidor de los que le han partido la cara a ese hijo de puta con cara de Dahmer. También me molestan los que ganan siempre. Recuerdo hace muchos años, cuando Mike Tyson lo ganaba todo, que un reportero dijo algo así como que a los humanos nos gusta alzar a alguien hasta lo más alto para después verlo caer desde las alturas, disfrutábamos con ese espectáculo más que con sus victorias, pues en esas estoy yo. Solo soy un humanos corriente.

Se ve que muchos estaban cansado de ver como Tyson destrozaba a los demás y había llegado el momento de que alguien lo destrozara el careto a él, así sin más. Podría seguir siendo el mejor boxeador del momento en su categoría, pero la gente ya se había cansado de él. Su momento había pasado, se acabó.


También me gusta la UFC por la cantidad de dinero que uno de estos gladiadores voluntarios se puede embolsar. Eso me gusta y me da envidia a partes iguales. Un tío que sea capaz de subirse a un octágono, partirse la cara con otro y llevarse más dinero del que yo voy a ganar en varias reencarnaciones es algo digno de admirar. Yo les aplaudo. Además, va a ganar toda esa pasta haciendo algo que le gusta, eso me da más envidia todavía. ¿Estar toda tu vida trabajando en algo odioso y aguantando a gilipollas para no ganar ni la cuarta parte de lo que gana uno de estos en 20 minutos, o entrenar a muerte, subir a jugarte la vida y tener la posibilidad de ganar toda esa pasta de una vez? Me quedo con la segunda.

Si esto se hubiese puesto de moda hace más de 40 años estoy seguro de que yo hubiera sido uno de los que entrenase este tipo de artes marciales mixtas. Pensando en esto de entrenar este tipo de artes, creo hoy en día todos los chavales tendrían que aprenderlas en el colegio. Eso, o dejar que un gilipollas que sí haya entrenado, vaya por la calle y haga un nudo con tu cuerpo para robarte el móvil, la cartera y las zapatillas. Bueno, en mi caso no creo que me robase ni lo primero ni lo último, porque las dos cosas dan la misma pena. La tercera también, pero con suerte puede pillar cinco euros y la tarjeta del día con muchos descuentos.

Hace poco hablaba de esto con una persona que decía que no quería que su hijo aprendiera a pegar, porque eso era como animarlo a hacerlo o convertirlo en un arma. A mi no me preocupa la gente buena que tienen armas o son armas, me preocupan los malos que son o tienen armas. Si un malo saca su arma, quiero otra para defenderme. Unos lo hacen para pegar y otros para defenderse, ya es decisión tuya como usarlas pero tenerlas hay que tenerlas. Bueno, eso es lo que pienso yo, que no quiero decir que esté en lo cierto.